Qué es y cómo mejorar tu pensamiento estratégico

Pandemia, videollamadas, celular, correos, redes sociales… Da la impresión que el ruido aumenta día tras día, ¿no?

Prueba esto antes de comenzar la lectura del texto: Cierra los ojos y respira profundamente 3 veces. Adelante, te espero…

No, no es un ejercicio “yogui” o una técnica new age de claridad mental, es darle oxígeno a tu cerebro para ayudarte en la forma en cómo procesas información. La idea es ayudarte a tomar decisiones más acertadas, ese pequeño momento que tuviste de respiración fomenta que tengas una mejor comprensión del texto que estás leyendo.

La realidad es que hoy existe demasiado ruido a nuestro alrededor, y dedicamos poco tiempo a pensar la forma en cómo actuamos y tomamos decisiones. No es que dejes de escuchar tu podcast favorito, el álbum nuevo de un artista que disfrutes o dejes de revisar tu Instagram o tu perfil de Twitter, lo que debes hacer es crear un espacio. Mucha gente asume que lo importante en los negocios, y en la vida, es tener una agenda llena y poder asistir a todas las reuniones posibles, recibir la mayor cantidad de información posible y después irse a dormir para repetir el ciclo durante los 5 ó 6 días de la semana laboral. Pero la realidad es que puedes ser mucho más eficiente y estratégico concentrando tus tareas y dándote tiempo para ti.

Estos son los 4 puntos que debes tomar en cuenta para mejorar tu pensamiento estratégico.

Tu momento

No se trata del tiempo, se trata del espacio, necesitas crear espacio para ti, para tus propios pensamientos, sin ruido y sin distracciones. Algo que te puede ayudar es hacerte un espacio de 45 min-1 h a la semana, puedes elegir un día como viernes por la tarde cuando la vorágine de la semana laboral disminuye. En esta pequeña sesión, siéntate y pon en silencio tu celular, apaga o cierra tu computadora y no te pongas audífonos para escuchar música o sonidos de naturaleza; sólo siéntate y usa estos momentos para pensar sobre ti, sobre tus decisiones, cómo te ves hacia futuro, qué has descubierto que te gusta hacer y qué no te gusta hacer; si tu trabajo te apasiona y no puedes vivir sin él; vaya, puedes pensar sobre tu trabajo también, pero la idea es que sea un momento de reflexión personal.

El camino

¿Qué quieres? Puedes usar el momento semanal que te sugerí anteriormente para hacerte esta pregunta, una y otra vez: ¿Quieres una casa con jardín? ¿Quieres ser director en la empresa donde trabajas? Responder estas preguntas es muy importante para identificar el camino que tienes que seguir, para poder imaginarlo y, consecuentemente, planear para lograr ese objetivo. Las acciones que tomas para obtener ese logro no es la estrategia, es la táctica; es decir: la serie de acciones que tomas para lograr un objetivo. Tener clara la diferencia es importante para tomar mejores decisiones. Para poder tener un mejor entendimiento de las acciones que puedes tomar, es necesario tener análisis hacia futuro, es decir: jugar ajedrez.

Ajedrez

Cada momento pensamos hacia futuro, de hecho, es uno de los elementos cognitivos que nos diferencian de otras especies, poder prever lo que sucederá en 5 segundos, 10 días o 5 años. Para poder pensar de una forma más estratégica, este concepto es clave: necesitas ver hacia el futuro; imaginar hacia dónde podría irse la negociación que tienes en curso o pensar qué regalarás a tu mamá en su cumpleaños. Esto es algo que los jugadores profesionales de ajedrez hacen todo el tiempo; vaya, es un fundamento básico de su proceso mental y fortalecerlo te lleva al siguiente paso: planear de forma más eficiente y tomar acciones para lograr lo que quieres.

Los planes son esenciales para cualquier aspecto de la vida, no quiere decir que dejes de ser espontáneo con la persona que amas, pero en el aspecto profesional, y muchas veces en el personal hacer planes es clave para poder lograr tus objetivos. La realidad es que existe un 99% de probabilidad que la situación que imaginaste o planeaste no se ejecute exactamente como tu creías, lo importante es poder imaginar diferentes escenarios que pueden reproducirse y tener una acción correspondiente para cada uno.

Recomendaciones

No pretendo ser algún gurú de los negocios o un experto en claridad mental y funcionamiento humano, pero me apasiona la estrategia, y poderla implementar en mi vida diaria es algo que me ha ayudado mucho a poder tomar decisiones y acciones de mejor forma en diferentes escenarios.

Te daría estos consejos que resumen este artículo:

- Designa espacio para ti, sin distracciones.

- Ten claros tus objetivos.

- Visualiza lo que puede pasar más adelante,

Para finalizar, me gustaría recomendarte material o contenido, que me han ayudado mucho.

Libros:

Pensar rápido, pensar despacio, de Daniel Kahneman

Ladrando al árbol equivocado, de Eric Barker

El punto clave, de Malcolm Gladwell

Contenido: Seguir a personas que son “expertas” en temas de pensamiento estratégico nos ayuda mucho a poder acostumbrarnos a esta forma de pensar, personas como Dorie Clark o Rich Horwath tienen mucho material en línea que te puede servir.

Diviértete, experimenta y planea. Busca siempre tener claridad en las decisiones que tienes, y recuerda que el ruido y los impulsos emocionales son los enemigos del pensamiento estratégico.